como en una pelÃcula de terror, ayer destrozaron con motosierras el Opy, templo central de la espiritualidad guaranÃ, y posteriormente prendieron fuego lo que quedó de la construcción, que con mucho esfuerzo y alegrÃa habÃan levantado con la colaboración de otras Comunidades.
En la horrible situación quedaron envueltos los niños, a quienes se los escucha en el video donde quedó registrado el acto vandálico. No se trata solo de un daño material sino de una herida al espÃritu y cultura guaranÃ, que quedará marcada por siempre y que carga con el peso de la discriminación, el odio, el racismo y la ausencia estatal.
Cuando -aún siendo violentamente atacados- enfrentaron de manera pacÃfica a estas personas, uno de ellos se atrevió a robarle el celular a un miembro de la Comunidad, para evitar que pudiera registrar el hecho, y asà quedó especificado en la denuncia radicada en la ComisarÃa de San Vicente: "Uno de ellos, el más joven, le sacó de la mano su celular marca Motorola color negro y se lo robó, y le dijo que si querÃa su celular fuera retirarlo a la policÃa, diciendo textualmente que no tiene miedo a ninguna autoridadâ€Â.
Todo esto está sucediendo ante los ojos de un Estado que decidió mirar para otro lado y darles la espalda a los Pueblos IndÃgenas que habitan suelo misionero, pero a quienes se utiliza cada vez que se puede.
"Es una tristeza muy fuerte, da bronca que la Justicia, el Gobierno, los que están en el poder no están escuchando a las Comunidades. Se tapan los ojos, no ven, no sé por qué. Creo que cada vez se siente más la discriminaciónâ€Â, expresó uno de los lÃderes de la organización tradicional mbya Aty Ñeychyro, Mario Borjas.
Y agregó: "Cuando una sufre, sufrimos todas las Comunidades. Ya venÃamos diciéndole a las autoridades locales, que puedan tomar el compromiso y realizar su trabajo como corresponde, pero nunca nos escucharon. Siempre se pusieron a favor de los blancos, no tenemos ningún respaldoâ€Â.
Sin embargo, aseguró que "estamos dispuestos a seguir luchando y lo vamos a hacerâ€Â.
Las denuncias ya fueron presentadas en fiscalÃa. No puede la Justicia seguir evitando su responsabilidad; la Comunidad Yvy Porã sigue esperando ver si es cierto que todos son iguales frente a ella.
Violencia sin lÃmites en Yvy Porã: motosierras y fuego
Los ataques se acrecientan con el correr de los dÃas y la inacción del Gobierno provincial. Las vidas de las familias de Yvy Porã corren un serio peligro ante la violencia y crueldad de los hermanos Didolich, autoproclamados “dueños†del territorio que tradicionalmente pertenece al Pueblo Mbya.
2022-11-02- 283